domingo, septiembre 16

CUALIFICATE EN CONCIENCIA INTUITIVA - Yogi Bhajan

CUALIFICATE EN CONCIENCIA INTUITIVA


Yogi Bhajan • 20 de abril de 1995

Para todos ustedes, la vida trata acerca de vivir.

¿Es verdad? Les estoy haciendo esta pregunta. La vida es vivir, ustedes saben. Puede ser una vida buena, una vida mala, una vida feliz, una vida infeliz, una vida conmocional o una vida emocional. Es vivir. ¿Sabes si es algo más que eso? Esa es mi pregunta.

Estudiante: Es sobresalir.

Yogi Bhajan: ¿Cómo sobresaldrás?

Estudiante: Meditando.

Yogi Bhajan: La meditación solo te ayudará a mantener tu cabeza clara. Esto es un factor crítico y decisivo en tu vida hoy en día. Porque tú sólo tienes una idea acerca de la vida desde el día de tu nacimiento hasta el día de hoy. Con esa idea, tú fuerzas tus hábitos de vida. “Tengo que vivir y tengo que vivir bien. Tengo que vivir protegido. Tengo que vivir seguro. Tengo que vivir esto…”. Cada terrible inseguridad y cada sensación desagradable en tu vida surgen porque te han enseñado desde el primer día que la vida es vivir.

Y si la vida es vivir, si —cito tal cual— esa es la tendencia, entonces, la pregunta es “¿si la vida es vivir, vivir para qué?”.

¿Vivir para vivir? Si es así, tengo que protegerme, tengo que vigilar mi persona, tengo que asegurarme, debo tener un balance bancario, debo tener una reserva, debo tener amigos, debo tener contactos… Sólo piensa en todo. Todo esto viene de un fenómeno, el pensamiento “la vida es para vivir”.

Pero si sucede que te dicen: “Déjame cualificar mi vida”, todos tus problemas se irán. ¿Puedes hacer esta pequeña cosa para ti mismo? Ustedes van a las bibliotecas, leen, van a la universidad, hacen doctorados, se convierten en médicos, en ingenieros, en empresarios, en artistas, solo Dios sabe en qué se convierten. Pero tú no pudiste convertirte en ser humano. ¡No lo eres! Cinco mil millones de personas en este planeta están sufriendo por una sola cosa: tú no te cualificas para vivir. Solamente estás viviendo.

Tu día comenzó esta mañana. ¿Cierto? ¿Te preguntaste, te interrogaste: “voy a cualificar mi día para mí el día de hoy”?

¿Lo hiciste? ¿Por qué no? ¿Quién demonios crees que eres?

Tú puedes interrogar al mundo entero, el mundo entero te puede interrogar, ¿pero tú no te puedes interrogar a ti? ¿Crees que empezar el día sin interrogarte a ti mismo es un buen comienzo de él? ¿Es esto lo que has aprendido por medio de la religión, por medio de la sabiduría, por medio de los buenos modales? ¿Acaso no sabes lo importante que es para ti estar para ti? Tú quieres que el mundo entero esté para ti. Todos deben amarte, todos deben cuidarte, todos deben estar allí para ti, ¿pero tú mismo no puedes estar allí para ti?

Cada día deberías decir: “Me voy a cualificar para este día y haré que este día sea un día cualificado para mí”. Deberías decir esto mismo cada noche, en cada momento, a cada persona, en cada oportunidad, a cada amigo, en cada idea.

Finalmente, cuando seas magnífico, deberías decirlo en cada pensamiento.

¿Qué es meditación? Cuando comienzas a separar. El intelecto libera mil pensamientos por cada parpadeo del ojo.

Tú comienzas a meditar automáticamente cuando empiezas a cualificar los pensamientos.

Un humano que no aprende a cualificar los pensamientos es peor que un pájaro, un animal o un pez. El abuso de las escrituras hacia dicho humano es horrendo. ¿Quieres escucharlo? ¿Quieres? Ellas lo llaman vishtaa kaa kiraa.

¿Sabes lo que es vishtaa? Excremento humano. Te llaman gusano en excremento humano. No es que el Torah haya dicho algo diferente que los Vedas o que el Siri Guru Granth o que la Biblia. Si realmente examinas cualquier escritura religiosa, esto es lo que encontrarás. Algunas veces, está dicho en un lenguaje que a ti no te importa porque no sabes el significado real.

Cuando sea que no te cualifiques a ti mismo, tú no cualificas el tiempo y el espacio para ti ni cualificas el cielo y la tierra para ti, y te descalificas a ti mismo para ser un humano. Cita textual. Ese es Yogi Bhajan. Ese es un hecho.

Tú y sólo tú puedes cualificar cada momento de tu vida, cada pensamiento de tu vida y cada realidad de tu vida, mental, alerta, objetiva, proyectiva y absolutamente en una progresión calculada, ¡para ti!

Tú no eres tú. ¿Por qué entonces estamos tratando contigo si tú no eres tú? Tú eres solo, tú sabes, un yoyó.

Tú vienes y vas. Por eso te divorcias, por eso te casas, por eso te enfermas, por eso vives en tu pasado, por eso tienes problemas mentales, espirituales, sociales y religiosos. No eres más que un atado de problemas. Y todos estos son problemas que tú creas. En realidad, no hay problemas.

¿Cómo puede ser eso?

Llab dant daa(n) di-o, to dudh di-o,

llab daant di-e, to aan da(n) de gaa.

—Dicho panyabi

Cuando no tenías dientes, Él te dio leche del pecho de tu madre.

Ahora, Él te ha dado dientes y ¿acaso crees que Él no te dará comida?

Cuando naciste, te dieron leche. Ahora, cuando tienes dientes, ¿Él no te va a dar comida? Cuando no tenías dientes, tuviste leche y una enfermera que te cambiara los pañales, que te diera ejercicios y que te masajeara, mas tú no puedes creer que estés hecho en Dios. Hay alguien que te posee. Tú no eres tú. Debido a que nunca has intentado cualificarte a ti mismo como un humano. Tú naces de la luz, tú eres la luz
y si te cualificas para reconocer que tú naces de la luz y que eres la luz, entonces, te iluminas.

¿Qué? ¿Pagarme cinco mil dólares el minuto te va a cualificar? ¡No! Eso es dar dinero, eso está bien, pero no funcionará. ¿Ir a terapia? ¿Ir a una religión? Ve a cualquier cosa, tú seguirás siendo un chiflado. Ve a ti mismo, ese es un comienzo. Porque tú naciste de la luz.

Aval alah nur upaaiaa kudrat ke sabh bande.

Ek nur te sabh llag upalliaa kun bhale ko mande.

—Bhagat Kabir, SGGS pág. 1349

No había más que una sola luz y, a partir de la propagación de esa luz, nació la vida. Así es como viaja el prana.

Todos nacieron por la trayectoria, la tendencia, el calibre y la capacidad de su karma. Por lo tanto, ¿quién es malo y quién es bueno? Todos pertenecemos a la madre naturaleza, Prakirti.

Ahora, meditarás conmigo en ciertas cosas, luego, tendré que dar una clase. Todo esto es parte del prefacio, ¿cierto? Ahora, di: “I, I, I, I” [en inglés]. Esto es un linga (señala la lengua).

Tú estás trabajando en tu hipotálamo, ¿comprendes? Así pues, tu lengua tiene que rotar en ciertos puntos meridianos, tú creas un sonido y éste tiene un efecto. “I”. La lengua no toca. ¿Entiendes? Te estoy enseñando la ciencia. ¿Acaso realicé toda esa disertación de mi doctorado para nada? “I”.

“I, I, I”. En este “I, I, I”, ¿ves dónde toca la lengua? Toca aquí arriba. ¿Ves? “I, I, I”. “I”. “I, I, I”. Sólo hazlo un poco libre, lo harás bien. Tú lo conseguirás. Tú no sabes. Te parece muy simple, pero no lo es. “I, I, I”. “I, ay, ay, ay”. ¿Sabes que, cuando tienes dolor, dices “ay, ay, ay”? ¿Sabes eso? Eso es un lenguaje humano. “Lenguaje automático” es como tú lo llamas. Esa es tu respuesta. “I” no es una respuesta, “I” (yo) es ego. Tú declaras tu existencia. Pero cuando dices: “ay, ay, ay”, eso es el dolor. Si escuchas ahora tus propias palabras, encontrarás que en tu “I” no hay dolor; en tu “ay, ay, ay”, hay dolor. Ahora, califícalo, júzgalo, evalúalo.

Ahora, observa esto. Di: “I. Ay, ay, ay”. Sólo evalúalo.

Estás diciendo las mismas palabras en el mismo momento, pero, automáticamente, tu respuesta será diferente. ¿Por qué? Hubo movimiento. La lengua toca el hipotálamo — un movimiento —. Los meridianos, tu memoria entera y los componentes cerebrales serán afectados inmediatamente.

Esto envía un mensaje hacia arriba. El hipotálamo únicamente controla las acciones automáticas. Así pues, dirá: “Esto no es automático”. Entonces, lo transferirá y lo cambiará a la personalidad en el lóbulo frontal. El lóbulo frontal responderá y dirá: “Espera un minuto, él está diciendo tres veces ‘ay, ay, ay’. Eso significa que no sabe qué es ‘ay’. Así que debe haber algún error en alguna parte”.

Básicamente, te dices a ti mismo tu infortunio. Te dices a ti mismo tu “infortunio”1. Ahora, esta palabra es “miss”(señorita). Miss Smith, Miss Katz, Miss esto, Miss aquello.

Y esta es “Miss Fortune” (Señorita Fortuna). ¿Sabes lo que quiero decir? Así que, vas a omitir esto. Este miss es diferente; cuando tú pierdes tu fortuna2.

Hay dos palabras que debes conocer: “mis-take” (error) y “mis-fortune” (infortunio). Eso significa que lo que tenías que tomar lo perdiste. Tú perdiste tu fortuna. Tú creas tu propio infortunio debido a tu error porque...¿? Porque tú no te entiendes. Tú nunca te entiendes, no importa cuánto estudies y con cuántos maestros vayas y cuántos servicios hagas. Nada funciona.

Nada funcionará hasta que tú, personalmente, te cualifiques como humano. Un médico se convierte en médico cuando él se cualifica a sí mismo como tal. ¿Has ido al médico? Yo fui hoy con mi doctor. ¡Cuán cualificado está él! Su oficina está llena de certificados solo para impresionar al paciente de qué tan capacitado está. Hay un esfuerzo por mostrar sus cualificaciones. Si no estás cualificado y practicas medicina,
te llaman curandero charlatán. Como un pato, haces cuac, cuac, cuac3. Y esto significa que no eres correcto, que no eres real. ¿Entiendes?

Sucede lo mismo al ser un humano. Cuando no estás cualificado como humano, tú eres un humano charlatán. Y de cinco mil millones de personas, ¡cuatro punto nueve, nueve, nueve, noventa y nueve son charlatanes! Así que, ¿qué es lo que escuchamos aquí? Patos: cuac, cuac, cuac. Una vez, fui a la Universidad de Stanford y teníamos una conferencia afuera. Allí había un estanque y estos patos llegaron. Ellos graznaron tan fuerte que la conferencia no ocurrió. Todos los patos empezaron a graznar y allí acabó todo. Nadie pudo conferenciar. Ningún altavoz fue lo suficiente fuerte para aminorarlos. Así que, ellos me preguntaron: “¿Qué podemos hacer?”.

Yo dije: “La verdadera conferencia ya está sucediendo.

Ese es el verdadero evento. Quiero decir, tú estás graznando aquí, tú vas a cobrar el dinero, pero nosotros hemos venido. Páganos el dinero y nosotros nos iremos a casa. La verdadera conferencia está allá. Están graznando muy bien.

Simplemente, tú no entiendes. Ellos no te entienden, tú no los entiendes”.

¿Sabes que tú no eres tú? ¿Sabes cada mentira, cada manipulación, cada esfuerzo que haces para probar que tú eres tú y que tú estás en perfecto control? ¿Sabes lo hipócrita y falso que eres? ¿Has tenido alguna vez una idea de esto? Todo el esfuerzo que tú haces es para probar que eres perfecto.

“Yo soy perfecto. Yo soy bueno. Yo estoy bien. Yo sé”. Tú no sabes nada ni una maldita cosa.

Hubo una vez una persona que dijo: “Yo puedo predecir cualquier cosa”.

Yo dije: “Aquí tienes cien dólares. Predice a qué hora irás al baño mañana”.

Él nunca pensó que yo le haría esta pregunta. Él rió y dijo:

“Yogiji, estás bromeando”.

Yo dije: “No. Aquí tienes cien dólares en efectivo. Predice la hora de tu llamada natural mañana. ¿Por qué tratas de predecir si yo seré rico o seré pobre? Digo, esto es una farsa.

Sólo predice tu propia urgencia natural, la cual es una parte esencial del cuerpo”.

Él dijo: “No puedo decirlo”.

Yo dije: “Bueno, ¿entonces qué más puedes decir? ¿Qué es lo que esto significa? Hijo, existe una ley. Aquéllos que saben, no dicen. Aquéllos que dicen, no saben. Esto es una charlatanería, una adivinación”.

Si tú comienzas a cualificarte, a cualificar tu día, a cualificar tu relación, a cualificar tu personalidad, a cualificar tus direcciones, a cualificar tu trabajo, a cualificar todo para ti, comenzarás a sentir quién eres. Luego, la debilidad se irá porque tú eres parte del infinito. Tú naces de la luz, por lo tanto, no hay oscuridad en tu vida y no hay escasez en tu vida. Tú tendrás una enormidad.

Thjel Mehel taa ko mile, llaa ko sadh kirpaal.

- Guru Arjan, SGGS pág. 255

Sólo él obtiene el servicio y la mansión del Señor, con quien el Santo es compasivo, a quien el Santo ha bendecido.

Los servicios y los palacios serán conferidos a aquéllos quienes son bendecidos por los santos. ¿Y quién es un santo?

Aquél que acepta la voluntad de su creador. En inglés, lo llamamos God (Dios). God es la Trinidad, God tiene tres letras: Generar (Generate), Organizar (Organize), Entregar (Deliver) o Destruir (Destroy).

Haz una resolución, no una disolución de ti mismo. No sigas la moda. Es muy chistoso. ¿Has ido a un restaurante? ¿Estás cualificado para ir a un restaurante? Ahora, estoy haciendo una pregunta. ¿Estás cualificado para ir a un restaurante? ¿De verdad? ¿Lo estás? Entonces, ¿estás cualificado para ordenar la comida? ¿Y estás cualificado para comerla? ¿La comes? No.

Tú siempre dejas la mitad de la comida. Nuestras estadísticas nacionales son que un tercio de la comida ordenada se deja y que el veinte por ciento de la comida ordenada siempre está equivocada. Debido a que nunca nos cualificamos a nosotros mismos.

Una vez, conocí a una persona que vino a almorzar conmigo. Esa persona —pensé— sí estaba cualificada para ordenar. Él le dijo al mesero: “Quisiera ordenar una papa asada con exactamente dos cucharadas de —escucha esto— dos cucharadas de queso cottage”. No podía creer lo que este caballero estaba ordenando. Bueno, él ordenó. Así que, llegó una papa asada, él abrió la envoltura plateada y la papa estaba cortada a la mitad. Tenía la mantequilla y todo lo demás a un costado porque era parte del platillo. Él no se comió aquello. Puso el queso cottage dentro de la papa, la masticó toda, se la comió decentemente, bebió un vaso de agua y dijo: “Gracias”.

Cuando estás cualificado, eres exacto. Luego, la especialización sale de ti. Eso se llama sabiduría. Exactitud, especialización. Porque tú estás cualificado. No malentiendas que, si te paras de cabeza con tus piernas extendidas, vas a ser una persona muy, muy virtuosa. ¡Olvídalo! Sólo serás cocinado como una papa. Nada sucederá. Un idiota seguirá siendo un idiota con cualquier cosa que haga porque un idiota sólo hará cosas idiotas.

Un humano nace para estar siempre alerta en su propio altar. Aquéllos que tienen un altar para ellos mismos no tienen otra alternativa más que ser las personas más puras, más poderosas y más sabias. Esa es la ley. Porque cuando tú te sientas en un altar, te sientas en un altar para ser tú. ¿Qué es un altar? Un altar es un lugar donde creas tu propia deidad o ambiente para ser tú. Al momento en que comienzas a ser tú, tus problemas comienzan a dejarte. Y la felicidad comienza a entrar.

¿Acaso tuve un letrero escrito en mi frente que dijera

“yo soy un yogui”? En lo absoluto. Yo no parecía un yogui.

Tenía un turbante rosa de lunares, pantalones a rayas y una camisa azul que ni siquiera podía abotonar. ¿Quién se hubiera imaginado que yo era un yogui? Ni yo mismo lo podía imaginar. Pero cuando las personas iban a verme, ellas me hacían preguntas y encontraban que estaba cualificado.

No pienses que si existe un desafío en tu vida, entonces, no tienes vida. La vida sin desafíos no existe. El desafío es aquello que es resuelto por ti y tu solución es tu cualificación.

Así pues, tienes que cualificarte.

MEDITACIÓN

¿Por qué entrar en detalle? Vayamos directo a la médula, aquí mismo, y lleguemos al tercer anillo del tronco encefálico para que podamos reorganizar el sistema neurológico. Así, podremos estar en nuestra conciencia intuitiva. ¿Suena esto muy científico? Así es como será la vida en cincuenta años más. Todo este conocimiento que tienes hasta ahora es una farsa. No funciona, no cualifica. Así que, ¿están listos?

Mano derecha con la palma hacia arriba. El centro de la palma debe tener una profundidad. No debe estar plana.

Es un factor muy cualificante. Es un ejercicio muy simple, no dolerá mucho, solo un poco. Coloca tu mano izquierda en la línea del diafragma con la palma hacia arriba. Cortará tu campo magnético, eso es todo. Esta mano izquierda únicamente separará el apana y el prana en el punto de uddiyana. Apana y prana están separados. Esta mano nada más tiene ese propósito.

Esta otra mano, la derecha, es la que creará el milagro. Siéntate con tu barbilla metida y el pecho hacia afuera, y cierra tus ojos. No tengas pensamientos.

Rehúsa pensar.

Rehúsa pensar. Vuélvete alguien sin pensamientos. Pongan esa sublime y bella canción de Singh Kaur, Rakhe Rakhan Har,

Dios nos protegerá. Sólo medita. Mantente sin pensamientos.

Once minutos sin pensamientos. La lucha inicia ahora. Al momento en que la música comience, tu lucha comienza.

Respira largo y lento. Inhala veinte segundos, sostén veinte segundos, exhala veinte segundos. (La música que se toca es el canto de Guru Ram Das de Singh Kaur.) Este es el mantra de los milagros. Mantente sin pensamientos, deja ir todo.

(Después de 11 minutos.) Inhala profundo. Sostén la respiración, aprieta la mano sobre el pecho y aprieta todo el cuerpo. Aplica una presión máxima en la línea del diafragma.

Exhala. Inhala profundo nuevamente, sostén la respiración, no te olvides de tu línea del diafragma. Presiónala lo más fuerte que puedas y contrae todo el cuerpo. Lleva toda la fuerza hacia ese punto.

Contrae toda la energía allí, en un punto. No es gran cosa, tú puedes hacerlo. Exhala. Ahora, si no has hecho esto dos veces, ésta es la última oportunidad, ¿de acuerdo? Inhala profundo, sostén firmemente. Ahora, contrae todo el cuerpo y presiona la mano izquierda sobre el diafragma fuertemente contra el pecho. Presiona tan fuerte como si fueras a tocar la columna vertebral a través de la caja torácica. Relaja.

Bien. ¿Puedo hacer una pregunta? ¿Fue bueno? Mentirosos.

Era sin pensamientos, ¿cómo puedes saber si fue bueno o malo? Lo que había que hacer era estar sin pensamientos.

¿Qué sabes si es bueno o malo? Ahora te sientes bien, ¿cierto?

Tú no sabes. Cuando llegas a un estado sin pensamientos, la mente maestra y el pensamiento maestro del universo comienzan a servirte. Luego, el hombre se convierte en un dios y Dios se convierte en su sirviente. La polaridad se invierte a sí misma al llegar a un estado sin pensamientos.

Mientras tu intelecto te de pensamientos, tú estás en tu propia telaraña. Entonces, tú tienes todos los miedos. Tienes todas las proporciones, propuestas, proyecciones… “Ah, ya, ya; Dios, no puedo creerlo”.

Yo vivo entre ustedes, yo los conozco. Yo viví como ustedes una vez. Yo era tal como ustedes. Ahora, vivo entre ustedes, los conozco. Pero si yo puedo hacer algo, ustedes también lo pueden hacer. Comiencen a cualificar sus pensamientos.

Cuando comiencen a cualificar sus pensamientos, ustedes comenzarán a purificar su ser. Y un ser purificado se vuelve el templo del espíritu. Entonces, todas las shaktis, todos los poderes, todo Prakirti comienzan a venir y a servir. Es algo bueno, ¿cierto? Nada malo. De lo contrario, ustedes están en venta. Cincuenta por ciento de descuento, sesenta por ciento de descuento. Todos los pensamientos, todas las ideas son solo para arrastrarte hacia algo. Eso no está bien.

Por consiguiente: (La clase canta.) Que el eterno sol te ilumine, el amor te rodee, y tu luz pura interior guíe tu camino... Sat Nam.

Bendita Luz, prevalece, prevalece, prevalece a través del camino. Permite que todos los nacidos de la luz en el origen reconozcan sus orígenes, cualifícalos a través de sus acciones y obras, comportamientos y pensamientos. En amor, en compasión, en bondad y en cuidado, que prosigamos en la bella, generosa y bienaventurada luz de Dios. Como criaturas de esta creación, que el Creador nos ayude, en la unicidad de ambientes de amor, gozo y felicidad. Danos la gracia y el resplandor para que podamos reconocernos como uno con el Señor. Sat Nam.

Meditación hacia un Estado sin pensamientos

No pienses que si existe un desafío en tu vida, entonces, no tienes vida. La vida sin desafíos no existe. El desafío es aquello que es resuelto por ti y tu solución es tu cualificación. Así pues, tienes que cualificarte.

Vayamos directo a la médula, aquí mismo, y lleguemos al tercer anillo del tronco encefálico para que podamos reorganizar el sistema neurológico y poder estar en nuestra conciencia intuitiva. Así es como será la vida en cincuenta años más. Todo este conocimiento que tienes hasta ahora es una farsa. No funciona, no cualifica.

POSTURA: Siéntate con tu barbilla metida, el pecho hacia afuera y tus ojos cerrados. Relaja el hombro derecho y el codo a tu costado; tu mano derecha, hacia el frente y viendo arriba. La palma no está plana, sino tiene una pequeña concavidad o profundidad. El brazo izquierdo está paralelo al suelo con la mano viendo hacia arriba y tocando el diafragma (área pectoral inferior). Esto es para cortar tu campo magnético. La mano izquierda separará Prana y Apana en el punto de Uddiyana.

Rehúsa pensar. Vuélvete alguien sin pensamientos. Mantente sin pensamientos. Deja ir todo. Pon Guru Ram Das de Singh Kaur u otra música sublime y bella como Rakhe Rakhan Har de Singh Kaur.

RITMO: Respira muy lento. Inhala 20 segundos. Sostén 20

segundos. Exhala 20 segundos.

TIEMPO: 11 minutos.

PARA FINALIZAR: Inhala, sostén la respiración durante 25 segundos mientras presionas la mano izquierda en contra del diafragma. Aprieta todo el cuerpo. Exhala. Inhala, sostén durante 25 segundos y lleva toda la energía hacia ese punto; no te olvides de tu línea del diafragma mientras aprietas tu cuerpo. Exhala. Inhala por última vez. Sostén durante 25 segundos, contrae el cuerpo y presiona la mano izquierda sobre el diafragma tan fuerte como si fueras a tocar la columna vertebral a través de la caja torácica. Exhala y relaja.

COMENTARIOS: “Cuando llegas a un estado sin pensamientos, la Mente Maestra del Universo comienza a servirte. El hombre se convierte en un dios y Dios se convierte en su sirviente. La polaridad se invierte a sí misma con solo llegar a ese estado sin pensamientos”... “Comienza a cualificar tus pensamientos. Cuando empiezas a cualificar tus pensamientos, comenzarás a purificar tu ser. Un ser purificado se vuelve el templo del espíritu, así, todas las shaktis, todos los poderes, todo Prakirti comienzan a venir y a servir... De lo contrario, estás en venta”.

1 comentario:

  1. Esto lo deberian de impartir las tan cacareadas "escuelas occidentales de negocios". En vez de crear tiburones, crearian plankton

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